La venta directa es un canal de distribución utilizado por las mayores marcas globales y también empresas emprendedoras más pequeñas para comercializar todo tipo de bienes y servicios, tales como joyería, utensilios de cocina, productos nutricionales, cosméticos, artículos para el hogar, energía y, seguros y muchos más.
El canal de venta directa difiere de manera importante de la venta minorista . No se trata sólo de conseguir grandes productos y servicios en manos de los consumidores. Es también una ventana donde las personas con mentalidad empresarial pueden trabajar de forma independiente para construir un negocio con una baja inversión en puesta en marcha y gastos generales.
Los consultores/revendedores de venta directa trabajan por su cuenta, pero afiliados a una compañía que utiliza el canal, conservando la libertad de manejar un negocio en sus propios términos. Los consultores/revendedores forjan sólidas relaciones personales con los clientes potenciales, principalmente a través de discusiones y demostraciones cara a cara. En esta era de las redes sociales, la venta directa es una estrategia de salida al mercado que, para muchas empresas y líneas de productos, puede ser más efectiva que la publicidad tradicional o asegurarse espacio premium en las estanterías. Millones de personas en todo el mundo eligen participar en la venta directa, porque disfrutan de los productos o servicios de una empresa y quieren comprarlos con un descuento. Algunos deciden comercializar estas ofertas a sus amigos, familiares y otras personas ganando comisiones por esas ventas. Los consultores/revendedores más exitosos pueden decidir ampliar su negocio mediante la construcción de una red de revendedores directos.